godines-al-poder

Sitio que habla de todo y sobre nada, en especial sobre lo último

Thursday, December 22, 2005

picardìa gitana


Uno siempre se quiere hacer el vivo y pensar que se las sabe todas, pero siempre hay alguien que es más pillo que uno.

Estaba esperando a cierta persona a la entrada de un mall el día de las elecciones, por lo que la presencia de personas era nula. Mientras esperaba sentado se me acerca una pareja de gitanas jóvenes, de unos 15 a 16 años, las cuales me preguntan por cierta dirección, la cual yo no conocía.

Ante mi respuesta, que supuestamente les cayó tan bien, por mi respeto y caballerosidad ¿?, una de las gitanas se ofreció a leerme la suerte en la palma de mi mano. Accedí ya que pensé que no podría sacarme dinero, me pregunta mi nombre y de donde vengo, le digo que me llamo Manuel y que soy de Stgo. En una mezcla de español y romané me señala que tendré buena fortuna, larga vida, pero que tengo una pena de amor, el típico discurso gitano.

Después de eso me pregunta si tengo dinero en mis bolsillos, le digo que no, sólo tengo la plata del pasaje y nada más. Me dice que quiere hacer un conjuro para que no me vaya mal en la vida y alejar la energia negativa, pero que para que no desconfie de ella, yo tenga el dinero en todo momento. ¿Tendrás un billete de 5 mil pesos?, a lo que muevo la cabeza negativamente, sólo tengo luca.

Me hace enrollar el billete en mi mano y saca una rama de arból, me pide un papel y me dice que ponga la rama dentro del papel, también aparece un hueso de perro donde tengo que poner el papel con la rama adentro. Tienes que remojarla en ruda por 2 días y beberte su jugo. Luego me pide que empiece a hacer una pelota con el billete, siempre en mi mano, saca una botella de agua, es agua bendita, y me moja la mano mientras sigo haciendo la pelota con el billete. Empieza a decir unas oraciones o plegarias, las cuales yo tenía que repetir en voz alta, después de 15 minutos de plegarias y pedidos al aire, me pide el billete, hecho ya una bola oda verde y mojada, te lo paso altiro no temas, y lo ESCUPE, acto seguido me pide que lo escupa también.

Este billete no te sirve ni a ti ni a mi, por lo que debe ser arrojado. Ahí ya puse cara de que onda, a lo que vuelve a repetir sus dichos, es para que resulte el conjuro y señala mientras se iba con su amiga nunca dejes que otra gitana quiera leerte la suerte.

Mientras la veo alejarse se me cae la teja, ¡¡Esta gitana tal por cual me cago con una luca!!!. Ya que solo tenía que desenrrollar el billete y esperar que se secara. No me podía la cara de verguenza al ver que a mi, el que las cachaba todas al vuelo, se lo había cagado una gitana.

Por lo menos me queda el consuelo que ella me aconsejó para el futuro, nunca dejes que otra gitana quiera lerte la suerte, es decir, no seas tan huevón de que te cagen de nuevo.

Sabias palabras.

Friday, December 09, 2005

Al Maestro Con Cariño


IMAGINE

Imagine there's no heaven
It's easy if you try
No hell below us
Above us only sky
Imagine all the people
Living for today...

Imagine there's no countries
It isn't hard to do
Nothing to kill or die for
And no religion too
Imagine all the people
Living life in peace...

You may say I'm a dreamer
But I'm not the only one
I hope someday you'll join us
And the world will be as one

Imagine no possessions
I wonder if you can
No need for greed or hunger
A brotherhood of man
Imagine all the people
Sharing all the world...

You may say I'm a dreamer
But I'm not the only one
I hope someday you'll join us
And the world will live as one

Tuesday, December 06, 2005

Cachureos


Acumular objetos o porquerías según como se le mire, desde fotos, cajas de fósforos y flayers de cualquier tipo, me han servido para poder recordar las cosas que en algún momento pensé en hacer, los sueños que alguna vez tuve y el futuro que alguna vez creí que podría llegar a tener.

Reviso un par de cuadernos viejos con canciones que escribí estando en el liceo. Pensar que tuve la ilusión de ser músico, o por útimo de estar relacionado con la vida del rock star, aunque bien criollo. Letras de Los Tr3s, El Otro Yo y una que otra tocata penca hacían que alimentara la idea de ser un Kurt Cobain que veá al Profesor Rossa, Los Años Dorados (la serie de las abuelitas) y que rayaba la papa con Robotech y los ThunderCats.

Leo unas Análisis y APSI que encontré en una caja tirada en el patio. Increíble cómo en un tiempo tan doloroso como los 80´s se intentaba informar y escribir sobre hechos como el caso degollados, las tortutas, la Cutufa o la CNI. Y pensar que ahora se prefieren temas más livianos y que no toquen a nadie que posea cierto poder o pertenezca a alguna organización, sea de derecha o izquierda. Cuando era más chico tenía como sueño haber vivido en esos años y haber sido al Frente, pero no se si hubiera sido capaz de matar a alguien o cargar un arma, e incluso de aguantar sin tener TV cable.

Guardo revistas con comentarios sobre revistas que iría a ver al cine, sobre discos que escucharía, de obras de teatreo que disfrutaría, pero que al final nunca llegaron a concretarse, ya sea por flojera, falta de tiempo¿?, o por no tener dinero. Más bien a gastar el poco dinero que tengo en algo que a lo mejor no cumpla las expectativas creadas. (Plata, plata, plata, todo se reduce al vil dinero. Aunque al final éste no nos resulta tan vil si disponemos de él o esta en nuestrso bolsillos). Como experiencia, trato de tener expectativas bien aterrizadas, para así lograr resultados que nunca imagine alcanzar.

Me gustaría tener una radio con cassetera para pder escuchar esas viejas cintas que uno grabó con canciones sacadas de la FM, que tenían títulos tan originales como Rock o Lentos. Todavía no asimilo al CD, sigo prefiriendo al cassete, a pesar de tener un n° aceptable de los primeros.

Muchas veces pensé en ser marino, futbolista, vampiro como el Conde Patula, karateca, tatuarme, ser Huckleberry Finn, dibujante de cómics, tocar guitarra, comprar una casa grande en Valparaíso, ir a África, vivir en Tahiti, Brasil o Hawai. Fui todo eso y ninguna cosa a la vez.

Viendo, revisando y releyendo todos estos cachureos que tengo en mi pieza y que no pienso botar, ya que no creo en la desechabilidad de las cosas, me permiten recordar la persona que fui, la persona en que me estoy convirtiendo y en la persona que alguna vez pensé que sería. Son una suerte de registro tangible de la evolución, mi evolución.

De vez en cuando es bueno revisar las cosas que guardamos del pasado, ya sea para reemplazarlas o desecharlas. O simplemente para ver si seguiste o trataste de alcanzar los sueños que te propusiste o si sólo te haz dedicado a criar un nido de polillas y arañas en tu pieza, lo que es poco creíble.

Thursday, December 01, 2005

Ahora creo en milagros!!! Now I belives in miracles

(...esta bitácora la hice mientras escucho música de Pearl Jam, con esto le grafico la importancia que le doy, ya que cuando disfruto a Pearl Jam no hago nada más, sólo siento la melodía ..)

A lo mejor esta cita sacada de un tema de los Ramones, que escuché en el recital de Pearl Jam, puede sonar un poco cliché, incluso cayendo en lo siútico, pero es lo que refleja el recorrido que he llevado a lo largo del semestre. Aunque mi experiencia en este camino comienza el año pasado cuando tuvimos Periodismo y Medios, ¿se acuerda?. A pesar de que usted siempre me señala que las preguntas no son ya utilizadas en periodismo de opinión, las ocupo igual porque las veo como un reforzamiento de lo que he escrito y también porque cuando escribo surgen dudas y cuestionamientos que me encargo yo mismo de responder.

Recuerdo el primer trabajo que nos encomendó, la crítica al Día de la Bestia del gordo De La Iglesia, y cómo ese pedido desnudó (...se escucha Better Man, mi tema preferido del grupo..) todas las falencias que mis capacidades ¿? poseían y que aún poseen, puesto que todavía considero que tengo mucho por asimilar. ¿Cómo una simple descripción de una película podía ser tan complicada?, y sin embargo cuando me llegó la crítica de vuelta noté la cantidad de errores y borrones que traía consigo la nota, un 5.0. debo reconocer que para mí, que soy un gran consumidor de todo tipo de cine, fue como una verdadera cachetada; seca, directa y con huella.

En los trabajos subsiguientes pude darme cuenta que mis opiniones, y lo que yo pensaba sobre las personas y sobre ciertas cosas siempre, las había guardado hasta un cierto punto. Ese límite estaba marcado por la sensibilidad del otro y por su tolerancia y comprensión, esto se debe, lo primero, como dice el dicho; nunca hagas lo que a ti no te gustaría que te hicieran. Y lo segundo ya es algo más complejo para mí, yo siempre he temido no poder congeniar con lo que dicen mis demás compañeros, en especial los de mi grupo de amigos (Silvia, Javier, Gota, Dani A y Pé, Fernando y Teresita), puesto que con esto pienso que me apartarán o que me dejarán solo, por eso es que constantemente estoy haciendo bromas o frases chistosas, para poder sentir que soy respaldado o parte de algo.

Siempre he sentido miedo de la soledad, aunque no niego que algunas veces es bueno tener un tiempo para uno mismo. Me creerá que en el verano quiero que comiencen luego las clases para poder ver a mis amigos y a los demás, y es que a pesar de todo, disfruto de la escuela y de lo que se produce en ella. Con esto tal vez pienso que no tengo vida o que ella es muy monótona, quizás es una cosa de ambas. Me desvié del tema de esta bitácora.

(...suena Given to Fly, un tema que habla de la esperanza..)

La segunda bofetada la recibí cuando encomendó hacer la columna sobre la política, en forma sarcástica, puesto que lamentablemente no logró entender ninguno de los chistes e ironías que escribí. Con esto experimenté una gran desilusión al ver que lo que yo expresó cotidianamente en forma oral no podía plasmarse en palabras, además de ver que a lo mejor usted nos decía hacer una cosa, pero que al final nos evaluaba otra. Me bajaba décimas por una coma no aparecida, pero no decía nada por una frase que yo consideraba genial, eso si que era un golpe para mi autoestima.

No podía entender como el expresar mis ideas era algo que valía tan poco, en términos académicos por cierto, pero luego comprendí que lo que yo decía no era lo que estaba malo, sino que era la forma en que lo decía. Esto lo fui descubriendo cuando hice el ensayo sobre la crítica social en Chile, la primera y única prueba en rigor, donde leímos a personas tan detestables como Consuelo Aldunate, increíble como gente con ese estilo de narrar puede aparecer en los medios y para más remate sacar libros.

(...tarareo Black, una canción para cortarse las venas, recuerdo a la niña que conocí en las Olimpíadas en Serena la semana pasada y con la cual hablo casi diariamente. Espero y quiero ir para allá muy pronto...)

En ese ensayo critiqué, y de sobremanera, lo que usted mostraba como crítica social chilena, las columnas de Aldunate entre otras que mostró y que aparecen en revistas como Ya y Mujer, y que en mi consideración no merecen ni ser estudiadas, en desmedro de otros personajes que no estudiamos y que nos podían haber servido de gran ayuda como el Rafa Gumucio, Patricio Fernández o a Juan Manuel Vial. A pesar de que le reproché eso, pensando y temiendo que la respuesta sería igual de dura, todo esto sumado a que el final se me borró cuatro veces, la razón de mis gritos en la sala de computadores y de su reto, me calificó con una nota aceptable. Este fue el primer trabajo donde puedo decir que mi muñeca estaba suelta.

Con la columna sobre la visita de los cañamitos me ocurrió algo parecido, aunque mi relajo me llevo al extremo de descuidar la forma en que se entregaba dicha columna, la cantidad de errores gramaticales y ortográficos fue escandaloso. Pero comprendí que iba por el buen camino, tenía que mejorar el formato pero el fondo era el correcto. Aunque todavía falló a la hora de hacer un texto de manera humorística, puesto que no logró separar lo que pienso de lo que escribo, que se vea la disonancia de los pensamientos frente a los hechos duros, por llamarlo de alguna manera.

Capítulo aparte fue el tema de la necrología, la que al final no pude terminar por las razones que paso a detallar ahora. Siempre me he sentido presionado para alcanzar el éxito o por lo menos para alcanzar ciertos objetivos, aunque estos no sean propuestos por mi, como ocurre con el desafío de terminar esta carrera lo antes posible, puesto que mi madre ha hecho un esfuerzo descomunal para que yo pueda estudiar y me siento con la obligación de retribuirle el esfuerzo.

Bueno, cuando empecé a escribir, comencé a ver que quizás no podría terminar lo que mi madre comenzó y con ello todos los planes que me había propuesto, como tener un trabajo que me gustará, un buena mujer, hijos. Y con ello pensaba que al final sólo viviría pensando en todas las posibilidades que me farré en mi vida. Debo reconocer que caí en un cuestionamiento de mis actuaciones y dudé de que realmente fuera capaz de cumplir con mi madre, mi familia y con mi mismo. No pido que con esta explicación me perdone por no entregar el trabajo, pero por lo menos que conozca lo que hubo detrás que hizo que al final no le pasara dicha tarea. Capítulo cerrado.

Con el tiempo fui descubriendo que en verdad no soy un perdedor como yo pensaba, en cuanto a mi persona real y mi papel como escritor. Pienso muchas veces que no estoy a la altura de varios de mis compañeros que escriben espectacular, como es el caso de Gustavo, Javier, Omar o Remiso. Muchas veces me han preguntado si tengo algún artículo en paniko.cl, a lo que digo que no, puesto que no me considero como capaz de responder a ese tipo de retos. Sin embargo, he podido aportar a algunas páginas web como mundocarrete.com y de-mente.cl con algunos textos propios, los que han sido bastante aceptados. Debe ser a que todos han tenido relación con la música, recitales y cosas por el estilo. De hecho el título de esta carta viene de una canción.

(...Yellow ledbetter se hace presente, su música es especial para este tipo de noches...)

El punto culmine de esta incipiente carrera de escritor lo marca el último trabajo que realice a conciencia y que se trataba sobre el museo a cielo abierto, un lugar que conocía de antemano pero no por eso me dejo de sorprender, y en donde pude por fin congeniar lo que usted pedía con lo que yo podía entregar y logre apreciar. Esta unión fue sellada con mi nota más alta, un 6.5, lo que hizo que ese trabajo me fuera pedido por una amiga para ser publicado en una revista creada por ella y donde aparecen artículos de un corte más bien creativo como poemas, cuentos y críticas personales. Eso me lleno de orgullo, pues nunca un escrito que tenía un fin marcadamente académico pudiera tener a la vez un valor agregado.

Tal vez mi inseguridad esta perdiendo el piso que tantos años le ayude a cimentar y que muchas veces me detuvo a hacer las cosas que realmente he querido, por miedo al rechazo o al ridículo. Estas dos semanas me han podido reafirmar lo dicho, ya que al trabajo sobre el museo a cielo abierto que me publicarán, se suma el hecho de que en las Olimpíadas recién pasadas conocí a una estudiante de periodismo con la cual he empezado a compartir todos mis procesos internos, lo que no es mayor, ya que en cuanto a mis sentimientos soy muy reservado y sólo unos pocos saben lo que he vivido desde que salí de la educación básica; trabajo, sacrificio, postergaciones, lagrimas. Pero me he vuelto a desviar del tema.

Un placebo realmente adictivo

Histeria, desmayos, peinados extravagantes, locura. Todo esto confluyó en un solo lugar: la Estación Mapocho. Los culpables no eran otros que Brian Molko y compañía, quienes dieron muestra de su capacidad para movilizar a las masas, las cuales repletaron la otrora estación de trenes llegando incluso a subirse a los viejos pilares de fierro para poder presenciar uno de los mejores recitales que se tenga memoria en el último tiempo.
La espera se hizo larga y angustiosa, las 9 mil personas se empujaban unas sobre otras, sudorosas, pidiendo agua, pidiendo que Placebo saliera pronto, que por fin se cumpliera su sueño de verlos en Chile. A las 22 horas se apagan las luces del escenario, los gritos y los flashes de las cámaras se multiplican. De repente comienza a sonar el palpitar de Taste in Men y los integrantes comienzan a desfilar uno a uno; los músicos invitados, el baterista Steve Hewitt, la ovación y las declaraciones de amor eterno se las lleva Brian Molko, él cual estrenaba un nuevo look con la cabeza rapada, saluda al respetable con una reverencia y agarra su guitarra la que comienza a vomitar notas que hacen que todo se vuelva un frenesí, con docenas de desmayos de por medio. La salida del bajista Stefan Olsdal completa la escena de esta seudo película de guerra, donde la gente cae muerta con solo escuchar la voz de Molko y la música de Placebo, convirtiendo al sector de prensa en un improvisado hospital de campaña.
La atmósfera es feroz e hipnotizante, todos aplauden y se dejan llevar por los acordes de The Bitter End, la intimidad que recrea Protege Moi, el sentimiento hecho melodía en Special Need. Parecía que estas canciones eran parte de su vida desde pequeños, que nunca escucharon otra cosa que no fuera Without You Im Nothing o This Picture. La sobriedad del escenario contrastaba con la fuerza y el carisma que imprimía Molko y el erotismo y sensualidad puestos por Olsdal.
El show era la manifestación viviente del fanatismo que en Chile se le profesa a la banda, donde cada tema, cada frase dicha por los músicos era respondido por aplausos, llanto y gritos desgarrados. La performance sonora fue digna de unos rock-star, Stefan Olsdal bailando como una verdadera odalisca y despojándose de su ropa. Por su parte Brian Molko se subía a los parlantes, se acercaba al público a susurrarles sus melodías, batía su guitarra al aire y contra los amplificadores, llegando incluso al éxtasis total al cantar tirado en el piso, cual niño en su vientre materno. Incluso se dio el tiempo de agradecer en español a los asistentes, agregando también un par de modismos irreproducibles.
La batería de éxitos continuó sin respiros: Slave to the Wage, una lentísima 36 Degrees, Pure Morning. Los hits se sucedían uno tras otro, nadie parecía saciarse y Placebo no descansaba en su intención de hacer de este uno de esos conciertos imborrables que se convertirán en leyenda y del que se hablará por un buen tiempo.
Tras tocar Nancy Boy, cuando el reloj marcaba las 23:30 hrs en punto, Olsdal, Molko y Hewitt se despiden del público, bajo gritos y alaridos de la gente que pedía más y más sin temor a sufrir una sobredosis, es más, queriendo ser víctimas de uno. Voces roncas y lágrimas se esperanzaban en que todo continuaría, hasta que la luz encendida y una mala música envasada dijeron lo contrario.
Pero eso no importaba, muchos querían ser víctimas de la adicción que representa Placebo; no querían despertar de ese sueño de hora y media que incluía todos las emociones presentes en el ser humano; amor, odio, melancolía, ganas de mandar a la mierda a los demás, todo mezclado en un solo trío británico. Es por eso que varios se repetirán la dosis el sábado, en su segunda y última presentación en Chile, y no los culpo, yo también hubiera hecho lo mismo, por que no existe rehabilitación posible que pueda luchar contra esa droga inglesa tan seductora llamada Placebo.

el comienzo y el final de una época

diciembre, tiempo de definiciones; pruebas, notas, laburo, retrospecciones, etc. Realmente es un mes donde se puede coronar todo lo amalo con algo bueno y viceversa.

En mi caso, este es el inicio de una era muy positiva en todo sentido, tanto personal como académicamente. Espero que el próximo año sea mejor.

Eso sería, no tengo nada más que decir. Espero que sto aparezca, ya que es el 3º blog que hago y ojalá resulte